Números en rojo: En febrero no hubo superávit fiscal

En febrero, las cuentas de la administración pública nacional cerraron con un déficit financiero de $186.635 millones, a pesar de los drásticos recortes de gastos relacionados con las jubilaciones, asignaciones familiares y provincias. El ministro de Economía, Luis Caputo, tuvo que hacer frente a pagos de intereses por $1,1 billones, especialmente al Fondo Monetario Internacional (FMI), según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).

El déficit no fue mayor debido a los ingresos de rentas del Fondo de Garantía y Sustentabilidad (FGS) de la ANSeS, que se contabilizaron como $206.024 millones. Sin embargo, se registraron retrasos en algunos programas de gastos y deudas no canceladas en el mercado de electricidad.

A pesar del déficit financiero, se mantuvo el superávit primario, que no incluye el pago de intereses. El superávit primario fue de $929.154 millones, un aumento del 1.805,5% en comparación con el año anterior. Los ingresos mejoraron debido al incremento interanual del tipo de cambio, especialmente en la recaudación del impuesto PAIS, derechos de exportación e IVA.

Por otro lado, los ingresos por aportes y contribuciones a la seguridad social disminuyeron un 23,6% debido a la disminución del salario real. Los gastos corrientes también disminuyeron un 29,5%, con las mayores caídas registradas en jubilaciones y pensiones, asignaciones familiares, PAMI, provincias, energía y transporte.

En enero, las cuentas del primer bimestre se mantuvieron en terreno positivo, con un superávit de $1 billón, incluyendo los ingresos del FGS. Los ingresos de la administración nacional en enero-febrero mostraron un leve crecimiento del 0,4% en términos reales en comparación con el mismo período del año anterior. Los gastos primarios tuvieron una caída del 33,6% en términos reales, con excepción de otros gastos corrientes que aumentaron debido a las transferencias a hospitales nacionales.

El informe de la OPC destaca que los haberes previsionales no alcanzados por los bonos sufrieron una reducción real del 43% durante el primer bimestre. Además, se menciona la existencia de deudas no canceladas en el Mercado Eléctrico Mayorista, que suelen ser cubiertas por CAMMESA y pueden generar gastos adicionales para el Tesoro.

El pago de intereses de la deuda aumentó un 34,2%, alcanzando un total de $2,4 billones, lo que resultó en gastos totales de casi $9,7 billones frente a los ingresos de $10,7 billones