Este jueves 10 de julio, trabajadores del Hospital Garrahan llevan adelante un paro de 24 horas en reclamo de mejoras salariales y condiciones laborales dignas. La medida, impulsada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), cuenta con la adhesión de médicos, técnicos y personal de distintas áreas del hospital pediátrico.
Desde el gremio advierten que los sueldos actuales no alcanzan a cubrir la canasta básica, y que la situación laboral en el hospital se ha visto deteriorada en los últimos meses. Por este motivo, además del paro, realizarán un abrazo simbólico frente al establecimiento y anticiparon una movilización para el próximo jueves 17 de julio.
Durante la jornada de protesta solo se garantizarán las guardias mínimas, la atención de urgencias y los turnos que no puedan postergarse por razones médicas. En cambio, las consultas ambulatorias y servicios generales funcionarán con atención reducida.
El Ministerio de Salud de la Nación, encabezado por Mario Lugones, cuestionó la medida y recordó que rige una conciliación obligatoria. “No cumplir con ese acuerdo atenta contra la buena fe en la negociación”, señalaron desde la cartera.
El conflicto también se enmarca en los recientes cambios en el régimen de residencias médicas, donde el Gobierno redefinió las residencias como “becas”, lo que —según los gremios— implica la pérdida de derechos laborales fundamentales como aportes jubilatorios, cobertura de salud y recibo de sueldo.
A su vez, generó rechazo la reciente designación de Mariano Pirozzo como nuevo director médico del hospital. Desde ATE-Garrahan lo critican por su perfil más ligado a la gestión administrativa que a la medicina pública, y aseguran que su nombramiento responde a una política de ajuste y vaciamiento del sistema de salud.