Un proyecto presentado ante el Concejo Deliberante busca derogar la Ordenanza N° 12.625-2/24, la cual modificó la Ordenanza N° 12.625/17 para permitir la venta de pirotecnia lumínica de bajo impacto sonoro en la ciudad. La iniciativa argumenta que la pirotecnia, incluso la de bajo impacto, genera graves consecuencias para la salud de personas y animales, agravando enfermedades respiratorias como el asma y las alergias, además de causar lesiones y quemaduras a quienes la manipulan. Se destaca que los fuegos artificiales son una fuente importante de contaminantes atmosféricos antropogénicos.
El proyecto hace hincapié en el impacto negativo de la pirotecnia en personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA), generando altos niveles de estrés, ansiedad y miedo, especialmente en niños.
Se argumenta que para proteger la salud de este grupo vulnerable, es necesario prohibir el uso de pirotecnia en su totalidad. La iniciativa también resalta el impacto ambiental negativo, con la liberación de gases contaminantes como el monóxido de carbono (CO) y el incremento del material particulado (PM) en el aire, lo que puede agravar enfermedades respiratorias y causar problemas cardiovasculares y visuales.
Finalmente, se menciona la contaminación del suelo y las fuentes de agua por metales pesados usados en la fabricación de fuegos artificiales.